Masa de queso quark y aceite para aprox. 16 unidades:
400 g de harina de trigo
1 sobre de levadura en polvo
1 pizca de sal
250 g de queso quark desnatado
75 ml de leche
75 ml de aceite para cocinar (p. ej., aceite de girasol)
2 cucharaditas de mostaza semipicante
Relleno:
1 manojo de cebollino
½ chile rojo
300 g de crème fraîche
200 g de dados de jamón
25 g de hierbas diversas picadas
1 cucharadita de mostaza semipicante
100 g de queso rallado
2 bayas de enebro
Además:
1 huevo
25 g de pistachos picados
Requiere un poco de práctica
1. Lavar y picar el cebollino. Lavar el chile y picarlo
(utilizar guantes de goma, ya que el chile es muy picante). Aplastar
dos bayas de enebro con el lateral del cuchillo y picarlas muy finas.
Mezclar los ingredientes para el relleno.
2. En un cuenco, mezclar la harina con la levadura en polvo. Añadir el resto de ingredientes para la masa y amasar con una batidora con ganchos de amasar; primero con la mínima potencia y después a máxima potencia hasta obtener una masa homogénea (no excederse en el amasado o la masa quedará pegajosa). A continuación, formar un rollo con la masa sobre una superficie ligeramente enharinada y estirarla con un rodillo hasta formar un rectángulo (aprox. 50 x 40 cm).
3. Cortar el rectángulo de masa en 4 tiras longitudinales y transversales de ancho uniforme, de modo que se obtengan 16 rectángulos del mismo tamaño. Echar una cucharada sopera de relleno en cada rectángulo. Doblar los rectángulos por el costado longitudinal. Presionar los bordes de la masa para unirlos, darles la vuelta y presionar firmemente. Colocar las empanadas sobre la bandeja de horno.
4. Batir el huevo y pintar las empanadas, especialmente los bordes.
Esparcir los pistachos uniformemente por encima.
5. Introducir la bandeja en el horno precalentado (calor arriba y abajo: 200 °C, aire caliente: 180 °C). Las empanadas estarán listas al cabo de aprox. 20 minutos.
6. Colocar sobre una rejilla y dejarlas enfriar o bien servirlas calientes.